McDonald’s, el gigante de la comida rápida, ha mostrado una sólida trayectoria alcista en los últimos meses, llegando a romper sus máximos históricos hace pocas semanas.
Sin embargo, una reciente noticia sobre un brote de intoxicación por la bacteria E. coli en sus hamburguesas ha generado una fuerte reacción en el mercado, provocando un hueco a la baja en su cotización.
Lo interesante es que, tras este importante retroceso, el mercado rápidamente rechazó esos precios bajos y el valor comenzó una recuperación el mismo día, lo que sugiere que muchos inversores consideran la noticia como un contratiempo temporal y confían en la fortaleza a largo plazo de la compañía.
Para aquellos interesados en aprovechar este momento, recomendamos una estrategia con un stop de protección en $290, lo que permitiría limitar el riesgo si el precio se debilita nuevamente.
A su vez, marcamos un objetivo en los $320, confiando en que el rebote pueda llevar la acción de nuevo a niveles cercanos a sus máximos.
McDonald’s presenta una oportunidad atractiva para los inversores que buscan aprovechar un retroceso puntual en un valor de alta calidad y resistencia, que podría beneficiarse de la recuperación tras un evento negativo pasajero.